lunes, 10 de febrero de 2014

Personas que se enamoran de la literatura


Tres eran, y son tres, los escritores que nos visitarán el próximo viernes 14 de febrero en Tordesillas. Tres especialistas en diferentes formas en entender y abordar el género narrativo.
Tres miradas que suben y bajan en un flujo constante (como la cinta de Moebius) por el microrrelato, el cuento y la novela.
Podéis leerlos en sus páginas web. 
Aquí os dejo el enlace de sus blogs para que podáis ir dando una vuelta por lo que escriben.






Es un auténtico placer poder contar con ellos, así que desde aquí esperamos que nadie se pierda esta importante cita. Nos mueve la pasión por el arte, y no hay un día mejor para celebrarlo. No olvidéis llevar bolígrafo y muchas ganas de escribir lo que vaya surgiendo.



13 comentarios:

  1. Estoy contando las horas. Ilusionada.

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  2. (Des)crónica de un taller muy esperado.

    Ayer, los vientos trajeron desde Madrid tres personajes variopintos, a estas tierras castellanas, mesetarias y frías.
    Tres eran tres, las hijas de Elena... (A no, calla, que me he liao)... Así comenzó la presentación de estos tres geniales escritores y mejores personas, tengo que decirlo. Manuel Rebollar Barro, Ernesto Ortega y Miguel Baquero. El hombre inquieto, el boxeador y el hombre tranquilo. Tres distintas formas de vivir la literatura, tres miradas sobre el micro, el relato y la novela diferentes y únicas pero, con un objetivo común, buscar la perfección, la voz propia y la belleza de las palabras. Provocar, cada uno en su estilo, que nosotros los lectores, quedemos atrapados en los mundos que trazan con sus letras.
    No puedo más que agradecer su presencia por estos lares y desear, que esta no haya sido la última vez que nos acompañen.

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  3. Miguel Baquero, Manuel Rebollar y Ernesto Ortega, tres formas diferentes de enfrentarse a la narración que coinciden en generosidad, sencillez y cercanía humana a la hora de enfrentarse al mundo.

    Un taller de escritura de tres o cuatro horas no me supone un esfuerzo, al contrario, para mí se trata de un tiempo bien invertido, de disfrute. Ese tiempo, para mí divertido, de ilusión, de aprendizaje… el viernes pasado me lo regalaron estos tres escritores, que renunciaron a su posesión individual, y, casi en una sesión de terapia de grupo, rompieron el silencio acercándonos a sus experiencias literarias.

    ¿Con qué palabras darles las gracias sin que sea una coletilla formal? Desde mi simpleza diré que asistí a su charla ilusionada y volví encantada; y que es estupendo tener a nuestra Rosa de los vientos ahí, en el palo mayor oteando y diciendo ¡¡MIGUEL BAQUERO, MANUEL REBOLLAR Y ERNESTO ORTEGA A LA VISTA!!


    MIGUEL BAQUERO,

    Me voy por las ramas, describo lo evidente con todo detalle (eso dice mi hija cuando le explico matemáticas), vamos que soy una persona enrollada; pero no me da para novela. Y sin embargo, es novela lo que prefiero leer. Sentir como me envuelve el texto, ser en parte los personajes… no me importa volver atrás y releer, porque quiero degustar cada bocado como la tarta de café receta de mi madre (lo sé, lo sé, no debo caer en la tentación de transcribirla aquí… ¿ni siquiera los ingredientes?)… ¿Dónde estaba? Ah sí, quería decir que he disfrutado y aprendido con tu exposición; que sutilmente has dejado una marca en mí, por eso de ahora en adelante, sin querer y de una manera fluida y natural aparecerá un guiño tuyo en la documentación metida a cajón, en las frases hechas, en las descripciones de Manhattan… de mis lecturas futuras.

    Gracias por los excesos y a lo que nos llevan.


    MANUEL REBOLLAR,

    Si alguno de mis profesores de literatura se hubiese parecido a ti habría disfrutado muchísimo más de las clases. Tienes el conocimiento, la capacidad de trasmitirlo y, sobre todo, el entusiasmo del que disfruta mostrando una obra de arte, además de la complicidad cercana que hace que todos nos sintamos parte del juego, protagonistas dispuestos a disfrutar.
    De verdad de la buena, que sepas que estás abriendo caminos neuronales nuevos con tus intervalos cazados. Por cierto, con el primer intervalo pensé que el nombre de intervalo se lo habías puesto porque la imagen estaba encerrada entre dos paréntesis de letras (título y comentario), luego he visto que son otro tipo de distancias; el de las rubias no lo pillo… ya te digo que estas abriendo caminos nuevos, aún tengo que desbrozar mucho.

    Gracias por ser y por estar.


    ERNESTO ORTEGA,

    El método. Fundamental. Paso a paso desde la idea hasta poner punto final al cuento de nunca acabar.

    ¿Dónde empezar a contar la historia? Nunca me lo había planteado, pero al oírte, de pronto, se hace evidente su importancia.

    Y ¿Si pruebas a cambiar el narrador?...

    Como la lluvia de Ernestina, desapasionada y lenta, has ahondado tus cristales de palabras en mi cabeza: corrección, crítica, unidad, narrador protagonista, principio, conflicto, tensión narrativa… Me has hecho un gran regalo.

    Gracias por pequeños detalles sin importancia, y por mucho más.


    A los tres escritores, a los profesores que lo facilitan a Rosa, también quería dedicárselo a mi familia… perdón por el lapsus, me he liado con los Goyas… Bueno, a todos los que os esforzáis por hacer posible lo imposible muchas gracias.


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  4. El viernes fue EL DIA, primero las dudas sobre si ir o no ir por la pereza siempre de ponerme en ruta. Al fin fui en la mejor compañía y llevaba las expectativas muy altas, porque estos encuentros siempre son estupendos, pero esta vez además fue GENIAL. Me sumo a lo dicho por Ana y añado algunos tesoros que tomé prestados.
    MIGUEL BAQUERO:
    Si escribir una novela tuviera reglas sería una mecánica no un arte.
    Hay que leer muchas malas novelas ( para así aprender lo que no hay que hacer).
    Todo comienza con una CHISPA que va creciendo.
    Hay que trazar un guion para no pretender hablar de todo.
    El estilo es: “como” se cuenta.
    El autor no debe calificar al personaje.
    Documentarse, olvidarse de tópicos y temas recurrentes.
    Construir un mundo literario e introducir al lector en él.
    MANUEL REBOLLAR
    Yo diría: MAESTRO. Sin pretender comparar, yo si tuve la suerte de tener dos profesores tan comunicadores como él, sirva este momento para recordar a la señorita Aurita y al profesor Miravalles que tanto amor a la literatura y a la palabra me dieron.
    Manuel me dejó tantas puertas abiertas que dedicaré muchas horas a navegar por ellas.
    Seré breve ¡¡¡. :
    Buscar la creatividad.
    Dejar salir desde dentro.
    Buscar nuestro propio punto de vista.
    Alcanzar algo a través de la catarsis.
    Comunicar en ausencia.
    Ser original no en lo que cuento sino en COMO lo cuento. Mira de otra manera.
    Somos: lo que tenemos la capacidad de trasmitir a los demás.
    La rutina es necesaria, la monotonía dolorosa.
    ERNESTO ORTEGA
    Nos enseñó la importancia de corregir, de crear corrigiendo.
    Nos propuso los procesos a seguir para una buena creación.
    Escribir es elegir lo que contamos y… lo que no.
    Terminar es saber callar a tiempo.
    La estructura debe ser compensada.
    La trama verosímil y bien documentada
    Nos aconsejó leer nuestros escritos en voz alta, o darles a leer y escucharles y una serie de pautas que espero estén en su blog pues deberíamos imprimirlas y tenerlas cerca cuando escribimos.
    Por mi parte una osadía final, un consejo para las olas: visitar los tres blogs.
    Espero haber sabido trasmitiros todos los sentimientos que viví en esta ESCALERA DE MOEBIUS en la que estamos enredados los amantes de la palabra.
    Margarita, taller de Ciguñuela

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  5. Muchas gracias a todos por asistir a la charla y por vuestra hospitalidad. Fue un día muy especial y tuvimos un público maravilloso.

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  6. La verdad es que así da gusto, sobre todo cuando la comunicación se convierte en algo interactivo y damos y recibimos continuamente. Muchas gracias a todos los que estuvisteis, intenso y abrumador.
    Saludotes de los de siempre

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  7. En primer lugar, dar las gracias a Marta, por conseguir traer al taller a estos fantásticos escritores Miguel Baquero, Manuel Rebollar y Ernesto Ortega.

    Aplacé un viaje durante unas horas para escuchar a estos maestros. El retraso mereció la pena.

    Aprendí que; lo granado de una novela surge de una chispa cualquiera,
    Que el guion tenga un sentido y que no hable de demasiadas cosas.
    No es tan importante lo que se escribe, si no, como se escribe.
    Como usar los tópicos, por ejemplo no usar nunca (Se puso rojo como un tomate) Usarlos para dar vida, color y olor a los personajes y a la novela.
    Como hacer un buen dialogo.
    Cerrar los finales, o simplemente dejarlos abiertos para que cada lector juegue con su imaginación.
    Que un relato es una historia donde se enfrentan el creativo y el critico.
    Las diferentes formas de corregir.
    Trasmitir a través de las emociones,
    Crear mundos utilizando la palabra y la fascinación, dejando que la creatividad salga de una manera espontanea con un hilo conductor.
    Aprender a mirar... para unos un churro, es simplemente, un churro, para otros LA SOGA DEL AHORCADO
    Los videos, los esquemas, la diferencia de lo que me gusta, y lo que no me gusta.

    Y un sin fin de recomendaciones ,que me serán muy útiles. Muchas gracias por esa clase tan enriquecedora.

    Estoy muy de acuerdo en que... SOMOS, LO QUE SEAMOS CAPACES DE TRAMITIR.

    Un saludo para todos.
    Isabel Taller de Tordesillas

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    1. Isabel, las gracias a Manu Espada y a Rosa Martínez que fueron quienes me facilitaron el camino. A ti también, por tu comentario que nos recuerda cosas que aprendimos y que en adelante trabajaremos en el taller.

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  8. Bueno, qué decir que no esté dicho ya... Mis compañeras son estupendas a la hora de contar todo lo que vivimos el viernes 14 en Tordesillas. Sencillamente fue genial poder escuchar a estos tres grandes autores y poder compartir con ellos un trocito de sus vidas.

    Miguel Baquero, Manual Rebollar y Ernesto Ortega, tres formas diferentes de enfrentarse al papel en blanco, tres formas difrerentes de trabajar, tres formas diferentes de transmitir sus vivencias, pero todas ellas enriquecedoras.

    Muchísimas gracias a los tres por acompañarnos esa tarde de viernes en Tordesillas, muchas gracias a los profesores del centro por acercarnos a estos autores y hacer posibles los encuentros y muchas gracias a Rosa y al resto de mis compañeras por hacer que esté deseando que pasen rápido los quince días que separan nuestros talleres.

    Tan solo me queda decir que...¡¡¡Quiero más!!!

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  9. ¡Miércoles! Día de taller de Escritura, Día de Fiesta. Y cada sesión es diferente, sorprendente, emocionante. Una corriente que se ve alimentada con las grandes figuras que en ocasiones nos acompañan. Entonces uno se da cuenta de las grandes posibilidades que existen en torno a la palabra. Y la alegría que da escuchar en alguna parte los nombres de esos autores y poder decir "yo he estado en una clase magistral impartida por ellos". Esta semana tenemos FIESTA y la compartiré con los compañeros de taller que cada sesión me enseñan también formas diferentes de expresión. Ya queda poco, nos vemos.

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  10. Tienes razón Elena, las horas se hacen cortas, fluyen las palabras...escuchamos, escribimos, participamos y sobre todo aprendemos a colocarlas y darle sentido.
    Gracias a la profe y a mis compañer@s cada tarde de miércoles soy un poco más feliz.
    Un saludo Isabel.

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  11. Hola olas,

    ¿El miércoles podemos ir disfrazados o es irreverente porque ya estamos en cuaresma?

    Besos.

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  12. Podéis ir como queráis pero acordaros de ir leyendo "Seda" de Alejandro Baricco y de llevar las propuestas del último día (deberes) o en su defecto "dinero para el cestillo".

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