lunes, 16 de diciembre de 2013

Fuego en el último taller de escritura de 2013

El próximo miércoles, día 18 de diciembre, tendremos el último taller de escritura del año 2013. Dos serán las actividades que nos ocupen: la primera será el coloquio sobre el libro de Ray Bradbury: Farenheit 451, una interesante distopía que, aun habiendo sido escrita en el año 1953, recoge algunas situaciones que podemos reconocer en nuestra sociedad actual.
Tras comentar este libro, veremos los dos últimos cortos basados en los cuentos de O'Neill, para lo que contaremos con el profesor Jesús Salviejo, quien nos hablará del tema central de estos cuentos que es, al igual que en el caso del libro de Bradbury, la censura y los intentos para evitar que la gente piense y decida por sí misma. 
Os esperamos, porque además será un buen momento para cerrar este 2013 navegante. La cita será a las 18.00 h en la biblioteca del Centro de Educación de Adultos de Tordesillas
Desde aquí, os deseamos lo mejor para estos días y el próximo 2014. Recordad que Ítaca seguirá estando ahí.




7 comentarios:

  1. Hablar de la censura en el cine o en la vida, sin tapujos, a cara descubierta, merece algo más que un aplauso. Gracias Jesús, por acercarnos la realidad a nuestra miopía.

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  2. Porque sólo el tacto diferencia al jardinero del observador, tan sólo la sutiliza diferencia la quema de libros al inconformismo desmedido, gracias por esta tarde tan completa.

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  3. Muchas gracias por vuestros comentarios. Fue un placer veros de nuevo y compartir con vosotr@s certezas e inquietudes. El libro en el que me basé ayer y en el que podréis encontrar muchos más ejemplos es La Censura Franquista en el Cartel de Cine, de Bievenido Llopis, en Notorous Ediciones. También Podréis encontrar información muy interesante en las Obras de Román Gubern Un cine para el cadalso (40 años de censura cinematográfica en España) y McCarthy contra Hollywood: la caza de brujas. Siento no haber logrado mostraros los instantes del Espartaco de Kubrik que os prometí. Pero será un excelente pretexto para volvernos a encontrar.

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  4. Acabo de encontrar este artículo http://blogs.elpais.com/historias/2013/12/el-guardian-del-orden-de-franco.html que hace referencia al escándalo Matesa del que os hablé ayer y que influyó tanto en el último coletazo de la censura franquista sobre el cine y el periodismo en España. No dejéis de leerlo.

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  5. Otra tarde extraordinaria la de este miércoles; había oído campanas sobre los cuentos de O.Henry pero me pilló por sorpresa la magnífica exposición que sobre la censura en el cine realizó Jesús Salviejo. Disertación sin duda muy amena, fundamentada en muchos datos, haciendo paralelismos entre el caso americano y el español, además de los muchos ejemplos que utilizó para ilustrarla que hizo que estuviéramos pegadas al proyector. Censura, esa gran arma cargada de poder. Censura del Ayer, del Hoy y del Mañana, claro que Jesús nos instruyó sobre la del ayer, pero estad muy atentos porque esa rueda sigue girando y girando, sin necesidad de regímenes dictatoriales, sólo hace falta tener el poder para empezar a cortar, eliminar, para no apoyar económicamente, para censurar el doblaje, el mismo guion o lo que se les ocurra…Pudimos comprobar que había mucha obsesión por la mujer, antes y después de la censura; antes al cosificarla, al usarla como gran reclamo y después al intentar disimular su anatomía. Muy interesante el planteamiento!!!
    En cuanto a los cuentos de O´Henry, los primeros que yo veía, me gustaron mucho, sobre todo el primero: “el rescate del Jefe Rojo”, qué historia mas sencilla! y mas buena! Todo un hallazgo J.B., su personaje de menor edad pero de mas talento!!! Y además en versión original: Todo un Lujo!!!
    S¡lv!a

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  6. Me ha gustado estrenarme con otro autor tan diferente y tan particular como es Bradbury y en un género que no recuerdo si he frecuentado antes.
    Hubo momentos de duda; supongo que al principio, hasta que te vas adaptando a la luz fría de la ficción, pero luego comencé a disfrutar mucho con su escritura dinámica de diálogos breves y a veces veloces. Yo lo encontré mas que lleno de Futuro – futuro que con el tiempo pasa a ser realidad, quizás ya con cierta pátina de óxido – muy cargado de filosofía – siempre atemporal – de interesantísimas reflexiones como la de la importancia de hacerse preguntas, o el debate que genera entre libros y/o televisores – hoy abriríamos el campo a mas aparatos multimedia – o la que hace entre el cambio de botones a cremalleras – antes la gente tenía mas tiempo para pensar, para filosofar, mientras se ataban los botones – Hablando de preguntas , me pregunto qué papel suele tener la mujer dentro de la ciencia ficción; en este libro desde luego es punzante la imagen que hace de ellas/nosotras: frívolas, superficiales, pobres, solitarias y estúpidas, que no se enfrentan con los hechos, sólo huir, divertirse…Lo dicho, me arranca las escamas de un tirón…
    Una vaga imagen que me ha quedado, es cuando al final, Montag, escapando – de una manera harto inexplicable – sale de esa ciudad en llamas, asfixiante, siempre vigilante… y llega al campo…, ese gran contraste me hizo pensar en que esa debería ser su ciencia ficción.
    He de concluir que me ha gustado y quizás ese final donde subyace un renacimiento, un reset, con los “padres memoriones” encargados de llevar el “fuego” de un futuro esperanzador…es lo que menos me ha gustado.
    Ya había leído “Zen en el arte de escribir”, muy recomendable, y ahora intentaré cumplir con “Crónicas Marcianas” que he empezado un par de veces y que por circunstancias ha quedado desplazado.

    Algunas de las frases que destaqué:
    - Los que no construyen deben destruir.
    - Soy uno de los inocentes que hubiese podido levantar la voz cuanto nadie estaba dispuesto a escuchar a los “culpables”, pero no hablé y , de este modo me convertí, a mi vez, en culpable.
    - La mayoría de nosotros no podemos andar corriendo por ahí, hablando con todo el mundo, ni conocer todas las ciudades del mundo, pues carecemos de tiempo, de dinero o de amigos […] el único medio para que una persona corriente vea el 99% de ello está en un libro. No pida garantías. Y no espere ser salvado por alguna cosa, persona, máquina o biblioteca. Realice su propia labor salvadora, y si se ahoga, muera, por lo menos, sabiendo que se dirigía hacia la playa.

    S¡lv!a

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  7. Sin duda, un taller muy interesante, en el que la ciencia ficción de “Farenheit 451” (publicada en 1953) hoy no parece tan de ciencia ficción.

    Ahora las pantallas de plasma nos rodean para llenar nuestro tiempo de manipulados mensajes; mientras la ley mordaza nos quema la capacidad de crítica: no podemos fotografiar, no podemos escribir, no podemos hablar de lo que vemos, de lo que nos están haciendo; que no se sepa, que no corra la voz. El cazador no debe espantar a la manada, por eso nos meten el miedo en el cuerpo, nos dicen que si no nos movemos no nos pasará nada, que sólo cazan al que corre, al que se sale de la fila. Pero no es verdad… ya nos han subido a los vagones… nos están gaseando la capacidad de pensar, y nos despojarán de todo aquello que no les sea de utilidad, porque para ellos sólo somos carne, carne de cañón.

    Un simple y divertido cuento de O’ Henry como “El rescate del jefe rojo”, se convierte en una historia proscrita porque lleva las palabras “jefe rojo”. Alguien, por asociación de ideas, es posible que piense en rojo y esto le lleve a comunista… a una guerra civil perdida, a una libertad perdida y, quién sabe, si además de pensar se le ocurre decir a alguien… y ese alguien lo comenta a su vez… y si… No la libertad no sólo hay que arrancarla de raíz, hay que vigilar constantemente para que no vuelva a brotar, aunque eso suponga desertizar la vida.

    Muy instructivo ese paso por la censura en la españa del dictador, quiero decir, la españa de Franco; no la actual de los nuevos Rajoy, Merkel, lobbies vende guerras o vende energías…

    Muchas, muchas gracias a Jesús Salviejo, que siempre nos conquista con sus conocimientos, su verbo ágil y certero y su entusiasmo por saber. Porque detrás de cada una de sus exposiciones hay un gran trabajo de documentalista y muchas ganas de compartir.

    Muchas, muchas gracias a Marta, que nos estimula a movernos siempre un poco más allá, hacia zonas no exploradas o vistas antes bajo una luz monocroma. Porque ella también tiene el fuego de Cormac McCarthy, es de los buenos.

    Feliz Solsticio OLAS de todos los mares.

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